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Palacio Nacional de Pena: Historia y belleza de cuento

Este artículo fue publicado por el autor Editores el 09/02/2025 y actualizado el 09/02/2025. Esta en la categoria Artículos.

El Palacio Nacional de Pena es uno de los monumentos más emblemáticos de Portugal y uno de los más impresionantes del mundo. Ubicado en la Sierra de Sintra, a solo 30 kilómetros de Lisboa, es una visita obligada para aquellos que aman la historia, la arquitectura y la belleza natural. En este artículo, exploraremos la fascinante historia de este palacio y su belleza de cuento.

Una historia llena de misterio y romanticismo

El Palacio Nacional de Pena tiene su origen en el siglo XIX, cuando el rey Fernando II decidió construir un palacio en la cima de la montaña de Pena, donde anteriormente se encontraba una capilla en ruinas dedicada a Nuestra Señora de Pena. El rey se enamoró perdidamente de este lugar y quiso crear un espacio que reflejara su personalidad y su pasión por el romanticismo.

El palacio fue diseñado por el arquitecto alemán Ludwig von Eschwege, quien combinó diferentes estilos arquitectónicos, como el neogótico, el neomanuelino y el neorrenacentista. El resultado es un edificio único en el mundo, lleno de turretas, balcones y torres, con colores vibrantes que se mezclan con la vegetación circundante.

La construcción del palacio comenzó en 1842 y duró hasta 1854, aunque las obras continuaron durante varios años más. El rey Fernando II y su esposa, la reina María II, utilizaron el palacio como residencia de verano y lo llenaron de obras de arte, muebles y objetos personales.

Después de la muerte de la reina María II en 1853, el rey Fernando II se casó con la cantante de ópera Elisa Hensler, quien también tuvo una gran influencia en la decoración del palacio. Después de la muerte del rey en 1885, el palacio pasó a manos de la familia real y fue utilizado como residencia de verano por varias generaciones.

Un tesoro nacional abierto al público

En 1910, el Palacio Nacional de Pena fue declarado monumento nacional y en 1995 fue incluido en la lista de Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Desde entonces, el palacio ha sido abierto al público y se ha convertido en uno de los principales atractivos turísticos de Portugal.

La visita al Palacio Nacional de Pena es una experiencia inolvidable. Desde la entrada, los visitantes son transportados a un mundo de cuento de hadas, con sus colores brillantes y sus innumerables detalles arquitectónicos. El interior del palacio es igualmente impresionante, con sus enormes salones, sus techos altos y sus muebles antiguos.

El palacio está rodeado de un parque de 200 hectáreas, que también es parte del Patrimonio Mundial de la UNESCO. El parque está lleno de caminos, lagos, fuentes y esculturas, y ofrece vistas espectaculares de la Sierra de Sintra y del Océano Atlántico.

Preguntas frecuentes

¿Cómo llegar al Palacio Nacional de Pena?

El Palacio Nacional de Pena está ubicado en la Sierra de Sintra, a 30 kilómetros de Lisboa. Se puede llegar en tren desde la estación de Rossio en Lisboa hasta la estación de Sintra, y desde allí tomar un autobús hasta el palacio. También se puede llegar en coche o en taxi.

¿Cuál es el horario de visita del Palacio Nacional de Pena?

El Palacio Nacional de Pena está abierto todos los días del año, excepto el 25 de diciembre y el 1 de enero. El horario de visita es de 10:00 a 18:00 horas en invierno y de 09:30 a 19:00 horas en verano.

¿Cuál es la tarifa de entrada al Palacio Nacional de Pena?

La tarifa de entrada al Palacio Nacional de Pena varía según la edad y la temporada. Los precios actuales se pueden consultar en la página web del palacio.

Referencias


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