Metotrexato: Para qué sirve y sus usos
Este artículo fue publicado por el autor Editores el 09/02/2025 y actualizado el 09/02/2025. Esta en la categoria Artículos.
- ¿Qué es el metotrexato?
- ¿Para qué se utiliza el metotrexato?
- Artritis reumatoide
- Cáncer
- Psoriasis
- Enfermedad inflamatoria intestinal
- ¿Cómo se administra el metotrexato?
- Precauciones y efectos secundarios
- Preguntas frecuentes
- ¿El metotrexato puede causar infertilidad?
- ¿Puedo beber alcohol durante el tratamiento con metotrexato?
- ¿El metotrexato puede interactuar con otros medicamentos?
- ¿El metotrexato puede causar cáncer?
- Referencias
- Conclusión
El metotrexato es un fármaco que se utiliza en el tratamiento de diversas afecciones médicas. Su acción se basa en la inhibición de la proliferación celular, lo que lo hace eficaz en enfermedades donde las células se dividen rápidamente. En este artículo, exploraremos en detalle para qué sirve el metotrexato y en qué condiciones se utiliza.
¿Qué es el metotrexato?
El metotrexato es un medicamento que pertenece a la clase de los antifolatos. Se trata de una versión sintética de un antimetabolito natural, el ácido fólico, que interfiere con el proceso de replicación y división celular. Fue aprobado por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) en 1953 y desde entonces se ha utilizado en el tratamiento de diversas enfermedades.
¿Para qué se utiliza el metotrexato?
El metotrexato se utiliza en el tratamiento de varias afecciones, entre las que se incluyen:
Artritis reumatoide
El metotrexato es uno de los fármacos más utilizados en el tratamiento de la artritis reumatoide, una enfermedad autoinmune que afecta a las articulaciones. El fármaco reduce la inflamación y la destrucción del tejido articular, aliviando los síntomas de la enfermedad y mejorando la funcionalidad de las articulaciones.
Cáncer
El metotrexato se utiliza como quimioterapia en el tratamiento de diversos tipos de cáncer, como la leucemia linfocítica aguda, el linfoma no hodgkiniano y el cáncer de vejiga. El fármaco actúa sobre las células malignas, inhibiendo su capacidad de dividirse y multiplicarse.
Psoriasis
El metotrexato es eficaz en el tratamiento de la psoriasis, una enfermedad de la piel que se caracteriza por la aparición de lesiones cutáneas engrosadas y escamosas. El fármaco reduce la inflamación y la proliferación celular, mejorando la apariencia de la piel y reduciendo los síntomas de la enfermedad.
Enfermedad inflamatoria intestinal
El metotrexato se utiliza en el tratamiento de la enfermedad inflamatoria intestinal, una afección que afecta al tracto gastrointestinal. El fármaco reduce la inflamación y mejora los síntomas de la enfermedad, como la diarrea y el dolor abdominal.
¿Cómo se administra el metotrexato?
El metotrexato se administra por vía oral, intravenosa o intramuscular, en función de la afección que se esté tratando y de la respuesta del paciente al fármaco. La dosis y la frecuencia de administración varían en función de la indicación y del paciente. En general, se recomienda no administrar más de una dosis semanal de metotrexato para minimizar los efectos secundarios.
Precauciones y efectos secundarios
El metotrexato puede producir efectos secundarios, especialmente si se utiliza en dosis altas o durante períodos prolongados. Los efectos secundarios pueden incluir náuseas, vómitos, diarrea, fatiga, pérdida de apetito, dolor de cabeza y erupciones cutáneas.
En dosis altas, el metotrexato puede producir efectos secundarios más graves, como daño hepático, supresión de la médula ósea y fallo renal. Por este motivo, es importante que el médico supervise de cerca el tratamiento con metotrexato y realice análisis de sangre regulares para monitorizar la función hepática, renal y hematopoyética.
El metotrexato está contraindicado en mujeres embarazadas o en período de lactancia, y en pacientes con insuficiencia renal o hepática grave, inmunodeficiencia o anemia.
Preguntas frecuentes
¿El metotrexato puede causar infertilidad?
No hay evidencia de que el metotrexato cause infertilidad en humanos. Sin embargo, el fármaco puede afectar a la función ovárica en animales, y por este motivo se recomienda a las mujeres de edad fértil utilizar métodos anticonceptivos durante el tratamiento con metotrexato.
¿Puedo beber alcohol durante el tratamiento con metotrexato?
El consumo de alcohol durante el tratamiento con metotrexato puede aumentar el riesgo de daño hepático. Por este motivo, se recomienda evitar el consumo de alcohol durante el tratamiento con metotrexato.
¿El metotrexato puede interactuar con otros medicamentos?
El metotrexato puede interactuar con otros medicamentos y aumentar el riesgo de efectos secundarios. Por este motivo, es importante informar al médico de todos los medicamentos que se están tomando, incluyendo los medicamentos de venta libre y los suplementos nutricionales.
¿El metotrexato puede causar cáncer?
No hay evidencia de que el metotrexato cause cáncer. Sin embargo, el fármaco se utiliza como quimioterapia en el tratamiento de diversos tipos de cáncer.
Referencias
- Metotrexate. DrugBank. Disponible en: https://go.drugbank.com/drugs/DB00568.
- Metotrexate. Mayo Clinic. Disponible en: https://www.mayoclinic.org/drugs-supplements/metotrexate-oral-route/description/drg-20062391.
- Metotrexate. MedlinePlus. Disponible en: https://medlineplus.gov/druginfo/meds/a682055.html.
- Metotrexate. National Cancer Institute. Disponible en: https://www.cancer.gov/about-cancer/treatment/drugs/metotrexate.
- Metotrexate. UpToDate. Disponible en: https://www.uptodate.com/contents/metotrexate-drug-information.
Conclusión
El metotrexato es un fármaco versátil que se utiliza en el tratamiento de diversas afecciones médicas. Su acción se basa en la inhibición de la proliferación celular, lo que lo hace eficaz en enfermedades donde las células se dividen rápidamente. Sin embargo, el fármaco puede producir efectos secundarios, especialmente en dosis altas o durante períodos prolongados. Por este motivo, es importante que el médico supervise de cerca el tratamiento con metotrexato y realice análisis de sangre regulares para monitorizar la función hepática, renal y hematopoyética.
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