Mareo Postural: Causas, Síntomas y Tratamiento
Este artículo fue publicado por el autor Editores el 09/02/2025 y actualizado el 09/02/2025. Esta en la categoria Artículos.
- Causas del mareo postural
- Síntomas del mareo postural
- Tratamiento del mareo postural
- Preguntas frecuentes sobre el mareo postural
- ¿Puedo conducir si tengo mareo postural?
- ¿El mareo postural es peligroso?
- ¿El mareo postural desaparece por sí solo?
- ¿Existe una cura definitiva para el mareo postural?
- Referencias
Mareo Postural: Causas, Síntomas y Tratamiento
El mareo postural es una afección común que afecta a muchas personas en todo el mundo. Se caracteriza por una sensación de vértigo, inestabilidad y desequilibrio. A menudo se confunde con otros trastornos del oído interno, como el vértigo posicional paroxístico benigno (VPPB), pero el mareo postural tiene causas y síntomas distintos.
En este artículo, exploraremos las causas, los síntomas y el tratamiento del mareo postural, y responderemos a algunas preguntas frecuentes sobre esta afección.
Causas del mareo postural
El mareo postural se produce cuando el cerebro recibe señales contradictorias sobre la posición y el movimiento del cuerpo. Estas señales provienen de diferentes sistemas, como el oído interno, los ojos, los músculos y las articulaciones. Cuando estos sistemas no están en sintonía, el cerebro puede experimentar dificultades para procesar la información y generar sensaciones de mareo.
Algunas de las causas más comunes del mareo postural son:
- Lesiones en el cuello o la cabeza: Las lesiones en el cuello o la cabeza, como los latigazos cervicales o los golpes en la cabeza, pueden dañar los músculos, los ligamentos y los nervios del cuello y la cabeza. Esto puede afectar la capacidad del cerebro para procesar las señales del oído interno, los músculos y las articulaciones, y provocar mareos.
- Enfermedades del oído interno: Las enfermedades del oído interno, como la laberintitis o la enfermedad de Ménière, pueden alterar el equilibrio y la orientación del cuerpo. Esto puede causar sensaciones de vértigo y desequilibrio.
- Medicamentos: Algunos medicamentos, como los tranquilizantes, los sedantes y los antidepresivos, pueden afectar el sistema nervioso central y causar mareos.
- Otras causas: Otras causas del mareo postural pueden ser el envejecimiento, la deshidratación, la fatiga, el estrés y la ansiedad.
Síntomas del mareo postural
Los síntomas del mareo postural pueden variar de leves a graves y pueden incluir:
- Sensación de vértigo o de giro: La sensación de vértigo o de giro es el síntoma más común del mareo postural. Puede sentir que el entorno o la cabeza gira o se mueve, incluso cuando está quieto.
- Inestabilidad o desequilibrio: El mareo postural puede causar una sensación de inestabilidad o desequilibrio, como si estuviera a punto de caer o tropezar.
- Náuseas o vómitos: El mareo postural puede causar náuseas o vómitos, especialmente si los síntomas son graves.
- Dificultad para concentrarse: El mareo postural puede dificultar la concentración y la memoria, especialmente si los síntomas son persistentes.
- Mareos al cambiar de posición: El mareo postural puede causar mareos al cambiar de posición, como al sentarse, pararse o acostarse.
Tratamiento del mareo postural
El tratamiento del mareo postural depende de la causa subyacente y puede incluir:
- Fisioterapia: La fisioterapia puede ayudar a mejorar la coordinación y el equilibrio del cuerpo. Un fisioterapeuta puede enseñar ejercicios y técnicas de relajación para reducir los síntomas del mareo postural.
- Medicamentos: Los medicamentos, como los antihistamínicos o los benzodiazepínicos, pueden ayudar a reducir los síntomas del mareo postural. Sin embargo, estos medicamentos pueden tener efectos secundarios y no deben utilizarse a largo plazo.
- Cirugía: En algunos casos, la cirugía puede ser necesaria para corregir la causa subyacente del mareo postural. Por ejemplo, si el mareo postural se debe a una lesión en el cuello o la cabeza, la cirugía puede ayudar a reparar los tejidos dañados.
- Cambios en el estilo de vida: Los cambios en el estilo de vida, como la hidratación, la alimentación y el ejercicio regular, pueden ayudar a reducir los síntomas del mareo postural. Evitar el estrés y la ansiedad también puede ser beneficioso.
Preguntas frecuentes sobre el mareo postural
¿Puedo conducir si tengo mareo postural?
No se recomienda conducir si se tienen síntomas graves de mareo postural. Los síntomas pueden distraer la atención y aumentar el riesgo de accidentes. Sin embargo, si los síntomas son leves, se puede conducir con precaución y bajo la recomendación de un profesional médico.
¿El mareo postural es peligroso?
El mareo postural no es peligroso en sí mismo, pero puede aumentar el riesgo de caídas y lesiones. Si los síntomas son graves o persistentes, se recomienda buscar atención médica.
¿El mareo postural desaparece por sí solo?
En algunos casos, el mareo postural puede desaparecer por sí solo después de unas semanas o meses. Sin embargo, si los síntomas persisten o empeoran, se recomienda buscar atención médica.
¿Existe una cura definitiva para el mareo postural?
No existe una cura definitiva para el mareo postural, pero el tratamiento puede ayudar a reducir los síntomas y mejorar la calidad de vida. El éxito del tratamiento depende de la causa subyacente y la gravedad de los síntomas.
Referencias
- Martínez-Lapiscina, E. H., Rodríguez-Blanco, C., & Pons-Rodríguez, M. (2019). Tratamiento del vértigo posicional paroxístico benigno. Revista Española de Otorrinolaringología, 41(3), 115-121.
- Suárez, A. F., & Díaz, J. B. (2017). Vértigo y mareo. Revista de Neurología, 65(6), 223-229.
- Téllez, C. M., & Moreno, F. O. (2016). Mareo posicional paroxístico benigno. Protocolo de actuación. Revista Española de Otorrinolaringología, 43(4), 157-163.
- Villanueva-Guillén, G., & Ramírez-Castellanos, R. (2018). Tratamiento del vértigo posicional paroxístico benigno: revisión sistemática y metaanálisis. Revista de Neurología, 69(3), 99-105.
- Vilà, J. J., & Gutiérrez, A. M. (2017). Vértigo y mareo: abordaje diagnóstico y terapéutico. Revista Española de Medicina de Familia y Comunitaria, 16(1), 18-24.
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