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Código Ictus: Guía Completa y actualizada

Este artículo fue publicado por el autor Editores el 09/02/2025 y actualizado el 09/02/2025. Esta en la categoria Artículos.

El Código Ictus es un protocolo de actuación estandarizado que se utiliza en el ámbito sanitario para la detección precoz y el tratamiento rápido de los accidentes cerebrovasculares (ACV) o ictus. Su objetivo es minimizar las secuelas y reducir la mortalidad asociada a este tipo de sucesos. A continuación, te presentamos una guía completa y actualizada sobre el Código Ictus para que conozcas su importancia y cómo funciona.

¿Qué es el Código Ictus?

El Código Ictus es un conjunto de procedimientos y recomendaciones que siguen los profesionales sanitarios en caso de sospecha de un ACV. Está basado en los consensos y guías clínicas nacionales e internacionales, como las de la Sociedad Española de Neurología (SEN) y la American Heart Association/American Stroke Association (AHA/ASA).

El protocolo se activa cuando un paciente presenta síntomas compatibles con un ACV, como parálisis facial, dificultad para hablar o pérdida de sensibilidad en alguna parte del cuerpo. El objetivo es garantizar una respuesta rápida y eficaz, reduciendo el tiempo entre la aparición de los síntomas y el inicio del tratamiento, lo que se conoce como "time is brain".

Los pasos del Código Ictus

El Código Ictus consta de varias fases que se suceden una tras otra para garantizar una atención óptima al paciente. Estas fases son:

  1. Sospecha y evaluación inicial: se realiza una primera evaluación clínica del paciente para determinar si presenta síntomas sugestivos de un ACV. Si se confirma la sospecha, se activa el Código Ictus.
  2. Traslado y atención en el servicio de urgencias: el paciente es trasladado al servicio de urgencias, donde se le realiza una valoración neurológica completa y se solicitan las pruebas diagnósticas necesarias, como una tomografía computarizada (TC) o una resonancia magnética nuclear (RMN).
  3. Evaluación de la gravedad y tratamiento: en función de los resultados de las pruebas diagnósticas, se establece el grado de gravedad del ACV y se inicia el tratamiento específico. Los fármacos más utilizados son los trombolíticos, que disuelven los coágulos que obstruyen las arterias cerebrales, y los anticoagulantes, que previenen la formación de nuevos coágulos.
  4. Derivación a la unidad de ictus: si el paciente presenta una afectación grave o permanece estable tras el tratamiento inicial, es derivado a la unidad de ictus, donde se le proporciona una atención especializada y se planifican las intervenciones terapéuticas a corto y largo plazo.
  5. Rehabilitación y seguimiento: una vez finalizado el tratamiento agudo, el paciente inicia un proceso de rehabilitación con el objetivo de recuperar las funciones perdidas y mejorar su calidad de vida. Además, se realiza un seguimiento clínico para controlar la evolución y prevenir posibles recidivas.

La importancia del Código Ictus

El Código Ictus es fundamental para mejorar el pronóstico de los pacientes con ACV, ya que permite detectar y tratar la enfermedad en las primeras horas, reduciendo las secuelas y la mortalidad asociadas. Según datos de la SEN, el tiempo medio entre la aparición de los síntomas y el inicio del tratamiento se ha reducido en más de la mitad gracias a la implementación del Código Ictus.

Además, el protocolo garantiza una atención homogénea y de calidad en todos los centros sanitarios, independientemente de su tamaño o localización. Esto es especialmente relevante en el caso de los ACV, ya que la rapidez en el diagnóstico y el tratamiento es clave para su éxito.

Preguntas frecuentes sobre el Código Ictus

¿Quién puede activar el Código Ictus?

El Código Ictus puede ser activado por cualquier profesional sanitario que detecte síntomas compatibles con un ACV. No es necesario ser un especialista en neurología para su activación.

¿Cuál es el tiempo máximo para activar el Código Ictus?

El tiempo máximo para activar el Código Ictus es de 10 minutos desde la sospecha clínica de un ACV. Cuanto antes se active, mejores serán las posibilidades de éxito del tratamiento.

¿Qué pruebas diagnósticas se realizan en el marco del Código Ictus?

Las pruebas diagnósticas más comunes en el Código Ictus son la TC y la RMN cerebrales. Estas pruebas permiten identificar la lesión causante del ACV y determinar el tipo de tratamiento más adecuado.

Referencias


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